Hace poco he tenido una visita muy especial. Annika y Tanja vinieron a Corea del Sur y hemos pasado algunos días juntos. Conocí a Annika y Tanja mientras estudiaba en Indiana State University en Estados Unidos.
El primer sitio donde fuimos fue Busan, una cuidad situada en la esquina sur-este de Corea del Sur, famosa por su clima, su pescado, sus playas y su gente alegre (¡como Málaga!). Pasamos dos noches en Busan, de viernes a domingo, y nos quedamos en un youth hostel que en realidad no era más que un apartamento con dos habitaciones grandes que el dueño alquilaba a mochileros como nosotros.
Busan me recordó bastante a Seúl, pero con playas y algo menos de frío. Aparte de eso, muchísima gente (3,7 millones en total, y casi 5 mil personas por kilómetro cuadrado), y muchos edificios de apartamentos por todas partes.
Los sitios más interesantes que visitamos fueron el mercado de pescado de Jagalchi y el Templo de Yonggungsa.
La playa de Haeudundae también es muy famosa, y en verano se llena (literalmente) de coreanos. Una chica de Busan nos contó que en verano esta playa se llena tanto que no se ve la arena, sólo gente por todas partes…
En un bar, de izquierda a derecha, Manolo, Alex, Annika, Ciro, Tanja y Pablo.